De acuerdo al artículo 131 del estatuto tributario ET, el cual estipula que para todos los efectos del Impuesto Sobre la Renta y Complementarios, la Depreciación de todos los activos fijos que el contribuyente posea de la siguiente manera: Al costo fiscal de cada activo depreciable se le restará su valor residual. De acuerdo a esto, los activos depreciables fiscalmente hablando no quedarán totalmente depreciados, lógicamente, mientras se le haya estipulado a este un valor residual.
Este mismo artículo estipula que dicho valor residual y la vida útil será establecido de acuerdo a la técnica contable.
De acuerdo a esto, se ha venido generando vacíos entre los conceptos, dado que el valor residual contable no tiene que ser el mismo valor residual fiscal, dado que la norma establece que se “determinará” el uso de la técnica contable, más no que se haya establecido fiscalmente con anterioridad.
Desde nuestro punto de vista, consideramos que la norma busca equipar las bases contables con las bases fiscales, y es por ello que consideramos que los activos depreciables deben tener el mismo valor residual contable como fiscal, al igual que la vida útil.
De esta forma, ya no existirán partidas conciliatorias en la declaración de renta y complementarios, puesto que la depreciación debe ser la misma.
Que pasa con los activos que ya poseían depreciaciones contables diferentes a la fiscal?
Esto debe revisarse a profundidad, determinar los impactos de seguir depreciando el 100% de los activos, nuestra recomendación radica en continuar depreciando los activos anteriores a la entrada en vigencia de la norma, y los nuevos establecer el valor residual y depreciar de acuerdo a las políticas contables.
De esta forma habrá menor reprocesos al momento de elaborar la conciliación fiscal de la declaración de renta y complementarios, y será mucho ya intuitivo la elaboración de la misma.
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